And do you brush your teeth before you kiss? Do you miss my smell? What about me? What about me? What about...?


Va dejando trozos de él por todas partes. Algún día desaparecerá conforme anda.

viernes, 30 de mayo de 2008

La historia interminable

Una amiga, una excelente escritora y mejor persona, me ha mandado esta historia interminable y me ha propuesto continuarla. La propuesta me parece interesante, así que aquí está mi párrafo. Espero que os guste...

INSTRUCCIONES
1. Cada persona pondrá el nombre de su blog delante de sus frases.
2. Enviará la historia a dos personas.
3. Las siguientes personas, al copiar el post, borrarán las direcciones de blog puestas, harán sus líneas y se las mandarán a otras dos, así sucesivamente.
4. No se puede devolver el post a la persona que te lo envió.
5. Y si te vuelve a tocar, no se la puedes enviar a la misma persona que se la enviaste.
6. El blog número 100 terminará la historia y se la mandará al email leinad19xico@hotmail.com.
7. Si tenéis alguna duda ya sabéis donde localizarme.
8. ¡Ah! Última y muy importante regla, la persona a la que aviséis de que es la siguiente, sólo tiene un día para coger el relevo, si en un día no lo ha hecho no vale, y se lo tenéis que comunicar y cambiar de blog.Si esto sale bien, durará un máximo de 100 días y serán unas 1000 frases. El responsable de la idea es http://www.melees.blogspot.com/


Éste es el relato:LA HISTORIA INTERMINABLE

Era impensable, no me lo podía creer, mi mente daba vueltas una y otra vez y no conseguía ser consciente de lo que había pasado, ya no había vuelta atrás, era todo tan confuso.Miré durante unos instantes el martillo ensangrentado, lo envolví en un paño que encontré en el primer cajón de la cómoda y lo escondí en el fondo del armario. A los tres minutos me encontraba en la calle, necesitaba airearme, pensar...En aquellos momentos mi mente aún no estaba preparada para ello... el aire gélido de la mañana cortaba mi rostro como un cuchillo acerado, aún sentía en mi pecho el ritmo acelerado de mi corazón sobresaltado por los espeluznantes hechos que había, en fracciones de segundo, vivido... Aún no podía explicarme cómo demonios había llegado el martillo hasta mis manos y porqué reaccioné de la forma tan brutal como lo hice... Sólo sé que había acabado todo, que era el fin de mi tortura y el comienzo de una vida mejor.Por primera vez, me sentí libre. Había logrado lo que estaba deseando hace mucho tiempo. ¿O realmente yo no lo había deseado nunca? Solamente las circunstancias me habían hecho llegar a aquel extremo en el que me encontraba.No, seguro que detrás de todo aquello había una fuerza misteriosa que me apoyaba. La pregunta era ¿Por que? Sacudí la cabeza.No me debía engañar por mas tiempo, no, yo ya se mi verdad, pero al estar dormitando tantos segundos de mi vida me va a costar desperezarla. Tal vez, la bruja de mi suegra no merecía brecha de tales dimensiones en su cráneo. Sin embargo, por una vez, creía haber hecho lo correcto.Por otra parte si yo no la hubiese atacado a ella quizás ahora sería yo la victima. Porqué a decir verdad la relación con mi suegra siempre había sido de amor-odio. Pero ya había pasado todo y no era hora de pensar en "si hubiera sido de otra forma". Ahora tenía que explicarle a mi pequeña hija Andrea que ya no vería más a su malvada y querida abuelita.Sentí un ruido lejano, parecían las agujas de un reloj y esto hizo que me sobresaltara. Estaba un poco aturdida, ¿se trataba sólo de un mal sueño? Me dirigí al último cajón donde creía haberlo guardado y toqué algo frío y húmedo. Algo extrañamente húmedo en un cajón. Retiré la mano instantáneamente, me asusté, aquel objeto no me resultaba familiar, pero la duda me carcomía por dentro. La eterna lucha entre la curiosidad y la prudencia, pues yo, en el fondo, sabía que debería cerrar ese cajón para siempre y olvidarme de lo que había tocado, pero no fui capaz de resistirme y volví a introducir temblorosamente la mano. Mientras cientos de instantes paseaban fugazmente por mi cabeza, pensé que lo tenía todo embrollado, estaba perdida. Me había metido en un montón de negocios insensatos en lugar de pensarlos despacio y con método. Las facturas de los gastos de mi propia casa y de mis aventuras en el juego se acumulaban hasta el infinito.........
Suspiré y me dispuse a esconder todos los rastros de mi acto. He de limpiarlo todo antes de que lleguen mi marido y mi hijo. Arrastré el cadáver hacia la bañera de la planta de abajo. Una sonrisa fugaz asomó en mi rostro cuando pensé que, a pesar de que tenía a mi suegra por una cabeza dura, su craneo se rompió con bastante facilidad. Supongo que casi cualquier cosa se rompería con facilidad con un martillo de acero tan pesado.
Lo primero era decidir que hacer con el cadáver, tenía varias opciones para deshacerme del cuerpo, pero debía pensar con calma, cúal sería la que contaba con menos posibilidades de no ser descubierta por la policia. También debía buscarme una coartada, mi suegra estaba de visita y muchos familiares lo sabían. Pero lo primero es lo primero, hacerla desaparecer.
Barajando varias posibilidades, al final he decidido descuartizarla en la bañera, para después tirar sus restos en varios contenedores, para ello me iré a otra ciudad y puede que a otra provincia, tengo que echarlos a los de basura orgánica y la trituradoras de basura harán el resto. Creo que esa es la mejor solución por ahora.
Pero, ¡mierda!, ¿cómo coño iba a descuartizarla si no tenía ninguna sierra? Afortunadamente, una bombillita iluminó mi azorado cerebro. Fui corriendo hasta la cocina y rebusqué en uno de los armarios. ¡Bingo! Siempre supe que los cuchillos de la Teletienda acabarían por servirme para algo. Ahora sólo faltaba comprobar si realmente eran capaces de cortar cualquier cosa, como afirmaba muy ufano el chinito que los anunciaba. Volví al cuarto de baño con mis instrumentos de trabajo y comencé la ardua y repugnante tarea.
Con paciencia y esmero, con una exactitud pasmosa gracias a un interesante libro forense de un familiar, empecé a despedazar la rodilla. Introduje el punzante objeto contundentemente, el carnicero lo hacía, y no parecía muy difícil.
De hecho, resultaba extremadamente placentero pensar cómo iba eliminando pedacito tras pedacito a aquella miserable mujer que había arrasado y teñido de resentimiento los años más adorablesde mi estúpido matrimonio. Todas las mujeres odian a sus suegras y yo no estaba dispuesta a ser una excepción. Lo malo es que el odio había acabado por que sostuviese una cuenca ocular con mi mano izquierda mientras pensaba: "Nunca conseguiré entender cómo hay gente a la que le pone la sangre. A mí me vuelve de lo más maléfica". NO hizo falta que proclamase sus carcajadas en voz alta.

/brianedwardhyde/
Todo fue rápido. Acabé la tarea, llevé las bolsas -cuatro fueron suficientes- al contenedor de la esquina y volví a casa. Entonces encendí un cigarro, llamé a Julio y le dije: "Julio, tu madre no ha vuelto aún, empiezo a preocuparme, llámame cuando puedas". Luego fregué los restos de sangre y me duché. Cuando salí de la bañera me miré en el espejo y comprobé la curvatura del vientre. Aún desnuda eché un vistazo en la habitación del bebé; faltaban cuatro meses y era importante poner las cosas en orden. Una tenía sus prioridades y, a pesar de lo que pudiera parecer, sus remordimientos. Pero ninguno por lo que acababa de hacer. Esa noche me metí en la cama con las sábanas limpias y frías, un nudo en la garganta y el corazón palpitante. Me sentía viva, podía oír hasta el canto del último grillo de la urbanización. Me masturbé, me retorcí en la cama y caí rendida. Más tarde soñaría con un amor de la universidad.
/brianedwardhyde/


Pues nada, les cedo el testigo a dos estupendas escritoras: Mj y Klover. Que aproveche...

jueves, 29 de mayo de 2008

Housemate


A estas alturas de mi vida, mis padres se empeñan en obligarme a vivir con mi hermano el año que viene. Yo podría vivir con cualquiera, aunque estaría mejor si yo buscara a mis compañeros de piso. Es que veo por ahí mucho fantasma hablando de lo bueno que tiene que ser vivir con él, sus reglas, manías y demás, pero aquí la única verdad que existe es que yo soy el compañero de piso perfecto.
________No soy ruidoso, tengo mis manías, no estudio y no me gusta fregar los platos. Soy lo peor dando consejos, así que no le como a nadie la cabeza tratando de mostrar mi punto de vista sobre temas sentimentales/profesionales. Pero esto es poco más que un apunte de lo que puedo ofrecer:
_____• Cocino muy bien. Yo cojo unas zanahorias y un pollo y te hago una comida que dejas el plato limpio a base de mojar sopas (estrategia para no fregar, dicho sea de paso).
_____• Soy un tierno déspota de la televisión. Sé lo que se cuece, todos los días visito vertele.com al menos 2 veces; conozco las audiencias, los horarios, estrenos y emisiones especiales, lo que vale la pena o lo que no, lo petardero (OT) y lo más petardero (Supermodelo). Tengo un don haciendo zapping por el que consigo ver tres cosas a la vez sin tragarme ni un anuncio. En TV no me gana nadie.
_____• Me gusta espantar a los testigos de Jehová tras darles esperanzas. Eso es un espectáculo que nadie en el mundo debería perderse.
_____• Te puedo recitar poesía o colgarte versos por la casa. Un día irás por la calle y oirás a alguien recitar un verso de Aleixandre, y tú dirás es de Aleixandre!, y esa persona sabrá que eres único y encontrarás a tu media langosta.
_____• Suelo recibir bastante correo. Aunque no sea para ti, querido hipotético compañero de piso, siempre hace ilusión encontrar una carta en el buzón. Además, el día que te alejes de mí encontrarás cartas escritas a mano por el menda lerenda.
_____• Oigo música que no molesta a nadie. Nunca te pondré Edurne ni Rammstein. Me limitaré a escuchar cantautores o rock suavito en plan Radiohead, y a cantar en la ducha con la esponja como micrófono.
_____• Cierro todas las puertas que hay abiertas, ya sean de un cajón, el balcón, el comedor o la puerta principal. Tampoco puedo ver una luz encendida, de modo que apuro hasta el último rayo de sol. Lo que nos vamos a ahorrar en electricidad…
_____• Si te cansas de mí, ponme Internet.
_____• No fumo ni bebo. La casa no olerá a humo ni yo a sexagenario soviético.
_____• Siempre que dudemos qué comer, apostaré por pizza o en su defecto una tarrina helado de chocolate con cookies y caramelo Hacendado. Ah, y no te obligaré a comer fruta a no ser que sean fresas con chocolate/azúcar o sandía.
_____• El cine albergará cada rincón de nuestra morada. Desde mis DVDs originales a los piratas, a las películas que tengo en el disco duro o mi pertenencia al videoclub de la esquina al que bajaremos a buscar una película cualquier sábado por la noche que no sepamos lo que hacer. Del mismo modo, habrá un calendario de la Fotogramas y pósteres de cine donde quepan.
_____• Soy rubio.
_____• No me gusta la gente, o al menos las masas. Nunca tendré la casa llena de pelmas escandalosos.
_____• Esto puede parecer gracioso, pero es verdad. Nada más acabar de comer me pongo a fregar las cosas.
_____• Nunca me oirás hablar de idiomas, traducción o masteres para dentro de diez años. SOY UNA PERSONA NORMAL.
_____• Tengo un nivel de adorabilidad que ya quisieran los osos amorosos. No sé enfadarme, el mal genio no va conmigo, siempre sonrío y estoy con todo el mundo de guay.
_____• Queda bohemio decir que vives con un escritor melenudo.
________Podría seguir, pero no quiero agotar. Otro día seguiré dando motivos por los que vale la pena vivir conmigo, pero ahora me tengo que ir a buscar testigos de Jehová.

miércoles, 28 de mayo de 2008

Que se acabe, que se acabe

No me estoy exigiendo cuanto pudiera. Los finales de curso siempre son amargos, cuando no por una cosa, por otra. Por lo general, por las despedidas, por los exámenes y por la amenazante presencia de un verano vacío y aburrido. Al menos ése ha sido mi caso. Este curso, sin embargo, el final se me presenta tranquilo, como el apacible navegar de una barca que se deja llevar por la corriente. Cierto es que no me he querido meter mucha caña con las asignaturas y al fin y al cabo, como siempre, he sabido escoger profesores y materia para hacer el mínimo esfuerzo y aprobar lo máximo.
________Tengo exámenes finales, lo que se dice finales, 2 de verdad y uno que va a ser una farsa. La farsa es interpretación, a la que voy a ir sin ánimo posible por si se me presenta algún santo y me la llevo de boca. Otras dos asignaturas me las he quitado con trabajos y parciales. Por último, me queda el soporífero trabajo sobre la soporífera novela Sueño en el Pabellón Rojo del soporífero Cao Xueqin.
________Como viene siendo habitual, he ido arrojando pequeñas migas de pan por el camino para no perderme demasiado este verano. A la espera de respuestas, que se diría. Si alguna de las cosas que tengo en mente llegara a meta, sería ciertamente la hostia. No soy un luchador nato ni soy el primero en nada ni pretendo serlo ni creo que llegue a serlo ni tengo ambiciones ni planes de futuro a largo plazo ni me molestaré en tenerlos por lo pronto.
________Lo único que tengo claro es que este fin de curso no va a ser amargo. Tengo más ganas que nunca de que acabe, aún no cuadra nada tras tres meses y medio aquí y sigo entre dos o mil aguas. Éste va a ser el curso más raro de mi vida, más agridulce, y en realidad no parece ni un curso. Creo que no me lo he planteado como tal. Dice una señorita que es mayo, primavera, y se hace vieja. Todos los días son primavera y me he cargado de años, diría yo.
________Qué ganas, señores, de que pasen estas semanas.
________Gracias, Indi, porque incluso en la distancia creo que fuiste de las pocas que se dio cuenta de lo que realmente pasaba por este mundo insustancial.

lunes, 26 de mayo de 2008

Todo el mundo está enfermo

Sales a la calle y lo único que ves es gente enferma. Todos tienen los ojos perdidos en las cuencas, los pómulos salidos y la cara pálida, como si llevaran meses corriendo por un desierto en el que el sol no deje huella. Ves a esa ejecutiva embutida en su traje de ejecutiva, rojo pasión o rojo putón según quien se lo ponga, y ves a ese obrero con el mono lleno de manchas y te das cuenta de que la cara de los dos es igual. Desnutridos, cansados, desganados. Enfermos. Todo el mundo deambula con la paciencia del que espera ser empujado por el viento. Y entonces miras y ves que uno entre un millón sonríe, pero te das cuenta de que es el loco. Hasta los perros parecen pedir paciencia y compasión entre el vaho de la niebla vespertina. Perros obesos que abrigan las esquinas con meadas amarillas, como la lluvia de Llamazares. Da pena, parecemos sufrir más cuanto más podemos vivir, no nos ayudan ni todos los elecaseimunitas del mundo, ni el café de las 8 ni el de las 9 ni la pastilla de Multicentrum. Parecen todos enfermos, imbuidos en esa maraña de horas de oficina, toneladas de papeles o trabajos de pico y pala, y en sus caminos se pierden de la mano de una música equivocada, el mundo individualista en el que cada cual sigue los impulsos de sus auriculares. Sólo el que se escapa de ésta puede oir a voz en grito una radio con Sergio Dalma cantando tópicos y canas a mansalva. No hay otra explicación, los lunes nadie es sexy.

martes, 20 de mayo de 2008

Covering the walls

Un día fui a la HMV de Swansea y encontré el póster de mi vida, ése que he estado buscando más que el de I want to believe, ése que me cruzó y me alcanzó y me enamoró la primera vez que lo vi. Se trataba de una reproducción de un cuadro de Edward Hopper, Nighthawks. No lo compré en ese instante porque estábamos buscando un regalo de cumpleaños, eran las 5 y media y las tiendas en Swansea cierran a las 6. Volví a los 2 o 3 días, comencé a pasar una tras otra las láminas y... no por aquí, no por allí... pregunté a los dependientes. Nada... Un mes o dos más tarde fui a Cardiff, la capital, y allí que entré de cabeza en el otro HMV. Tampoco estaba. La última esperanza estaba en Londres, donde esta cadena (lo más parecido que tienen por ahí a nuestra Fnac) tiene muchísimas tiendas, algunas una pasada, como la que tienen en Oxford Streer. Total, que me recorrí los pasillos, pregunté, investigué... NADA. Aprendí una lección: cuando se presente la oportunidad de tu vida, no la dejes pasar. Total, este post es más que nada un favor que me hago. Si alguien encuentra en alguna parte alguno de estos dos cuadros en versión póster, que avise y, si no es mucho pedir, lo compre de mi parte. Prometo enviar el dinero y recompensar con creces xD
Pero no me digáis que no son una cucada...

Nighthawks (Noctámbulos, literalmente Halcones de la noche)

Entre les trous de la memoire (Entre los huecos de la memoria)

sábado, 17 de mayo de 2008

Me voy de fiesta (remix)

La siguiente pregunta no sé a dónde nos llevó, creo que a ninguna parte, como siempre que se empieza con estos planteamientos. No crees en Dios y crees en los extraterrestres, ¿por qué? Pues… a ver, en este sentido no hay nada seguro, nada afirmable al 100%. No obstante, existen más pruebas físicas de la existencia de vida extraterrestre que de la existencia de Dios. Ahora me puedes venir con esto de que a mi prima Engracia la del pueblo se le apareció el Señor y que ahora la mujer llora sangre y tiene unos estigmas que quién los tuviera, y que de todos los pueblos de la comarca vienen todas las señoras que se llaman Engracia o cosas por el estilo en procesión para ver a esta señora, la elegida. Claro que así, casos como éste los hay por centenares a lo largo de la Historia. El que no ha visto a Dios ha visto a la Virgen, a un ángel o a Satanás que sube a tomar el fresco, y todos han venido a revelar algo importantísimo que luego queda en agua de borrajas porque… porque las mentiras tienen las patas muy cortas.
________Yo todo esto lo asocio al fanatismo. Los fanatismos son muy malos en la religión que sean, ya que conducen a respuestas exageradas y planteamientos restrictivos e injustos de la vida. Las pruebas siguen siendo poco más que testimonios o galletas María con forma de rostro sagrada —hablando de rostros, una de las caras se parece sospechosamente a la imagen que se tiene hoy en día de Jesús, ¿que no?—, por lo general se dan en pueblos pequeños o en zonas donde la fe es la última esperanza frente a la miseria, o en ciudades donde resultan ser movimientos sectarios. De acuerdo, mi visión de la religión ha mutado muchísimo a lo largo de mi vida, aunque si hay algo importante es que nunca he sido creyente acérrimo; se empieza con lo típico, lo que cree cualquier niño al que se instruye en una doctrina. Lo malo de la sociedad es eso, que se come la cabeza del individuo desde antes de nacer. Gracias a Dios —permitidme ser mordaz— esto está cambiando… Estamos en el siglo XXI. Hacemos cosas impensables hace 50 años, dentro de 50 años haremos cosas impensables hoy en día. El freno del progreso es en gran parte la religión con su justificación moral, con su aire de estar por encima de todo. Pero (y crucemos los dedos) cada vez se difumina más ese poder.
________Así pues, afirmo que no creo en Dios porque no tengo pruebas. Necesito certezas, cosas que lo justifiquen. Creo en los extraterrestres. Cuando se habla de pruebas en este terreno se suele tomar todo muy a coña, y en parte se puede comprender. El ser humano es egocéntrico, y por este simple hecho creemos que si existe algo más, vendrá a nuestro encuentro como corresponde. Nosotros somos Los Putos Amos, ARRODILLAOS ANTE NOSOTROS, ¡oh sí, oh sí! En fin… también a lo largo de la Historia se han dado casos de avistamientos no tal y como los suponemos y concebimos hoy en día, pero hay muestras. Cosas que aparecen en el cielo. ¿Aviones? Claro que sí, en el imperio egipcio los había a puñados… Ahora asumimos que se trata de un avión, un globo aerostático, lo que sea producido por el hombre… es fácil y nos da la respuesta. El ser humano es débil y teme muchas cosas, una de ellas la soledad. La idea de que no estamos solos en el universo es alentadora: cualquier hombrecillo con miedo e imaginación podría haber llegado a esta solución: se trata de algún ser vivo que ha venido a decir hola o a inspeccionar. Ay, escépticos de vosotros. Dejemos esto para la ciencia-ficción, de acuerdo, pero a mí no me ha explicado nadie cómo hicieron las pirámides de Egipto —¿sangre hebrea?— o cómo encontraron las instrucciones del Ikea Stonehenge.


(y siento dejaros a medias, pero no ntengo internet en casa...)

miércoles, 14 de mayo de 2008

Memories

Como sabéis, uno es alma inquieta y cierra unas puertas para abrir otras. Desde aquí os invito a que os paséis por mi álbum de fotos, que trabajo y tiempo me está costando hacer una selección en condiciones entre las miles de fotos :)

Para llegar, no hace falta más que pinchar aquí.

martes, 13 de mayo de 2008

Me voy de fiesta

El viernes por la noche no tenía pensado hacer nada, como mucho quedarme en casa viendo episodios de El prisionero, una serie británica de 1978, aunque me había propuesto ir a una fiesta a un piso. Tal vez eso sea lo más parecido a una fiesta erasmus que haya visto en Granada, salvando las distancias. En Swansea no importaba la afluencia de gente, el alcohol que bebieras o los decibelios por metro cúbico; aquí, sí. De hecho, no bebí nada de alcohol. Me he vuelto abstemio desde el incidente del DV8 que NO PIENSO repetir, así que al final llegué entre la lluvia cargado con mis 2 litros de Cocacola helada.
________La fiesta tenía ese tono relajado, de ambiente de charla y tal, mucha gente a la que no conocía y otra a la que sí, cada vez todo más distendido y con más ganas de hablar. Lo último que esperas que te pase en una fiesta es acabar hablando de la relevancia del ser humano en los planos superiores del universo. Dejo aquí la cadena de reflexiones.
________Lo típico, todo empezó conmigo diciendo la frase mítica: soy de Bélmez de la Moraleda. Que no te suena, ya... ¿conoces el pueblo de las Caras? Sí, ése es mi pueblo, ése es mi Bélmez, sí. Yo creo que es verdad lo de las Caras, para qué te voy a engañar, porque es algo con lo que llevan 30 años de investigaciones y no han llegado a nada en claro, y dicen: será la humedad, son manchas de aceite, pero joder, digo yo que en 30 años les ha dado tiempo de averiguar la composición química del aceite o del agua. Y... por otra parte, con el paso del tiempo las caras se desplazan, mutan, aparecen unas y desaparecen otras, aunque siempre se quedan las míticas. No, yo no creo en cosas parapsicológicas; de hecho, si no fuera de Bélmez probablemente no me lo tragaría, yo soy un escéptico de cuidado, para qué engañarnos.
________Ahora es donde comienza mi lucha de contrarios. No, no creo en espíritus, fantasmas ni esas cosas. No, no soy creyente, no creo en Dios, soy ateo redomado. Bueno... hay algo en lo que sí creo, en la existencia de extraterrestres. Es que son muchos años y las 9 temporadas de Expediente X a mis espaldas, ¿que no? Bueno... joer, lo de los hombrecillos verdes no tiene por qué ser así, de acuerdo, pero estoy totalmente convencido de que en la inmensidad del universo existen más seres vivos. Lo bueno de esto es que no tienen por qué ser seres de vida inteligente como nosotros, sino organismos que se han adaptado a unas condiciones determinadas en las que pueden vivir, organismos que pueden tener un metabolismo aeróbico o anaeróbico, o algo tan ajeno a nuestro mundo conocido que no podamos ni atisbarlo. Incluso puede que, ya que el universo es infinito, haya en un sistema de otra galaxia un planeta donde vivan otras criaturas con vida inteligente que ahora mismo se estén preguntando sobre nuestra existencia. ¿Por qué, si existen, no sabemos de ellas? Porque, al igual que nosotros, aún no han desarrollado una tecnología suficiente como para ponerse en órbita a lo largo de distancias gigantescas hasta contactar con nosotros. O porque a lo mejor siguieron nuestro paso antes que nosotros y lo mandaron todo a la mierda, se cargaron su planeta y ahora han desaparecido para siempre. O... porque se trata de una civilización más inteligente y avanzada que nosotros, y por tanto nos considera carentes de interés, de modo que prefieren seguir alejados de nosotros. Vamos a suponer, ya que estamos, que una de esas brillantes ideas que tiene el ser humano de enviar cohetes espaciales con dibujos de nuestros cuerpos, con objetos y material documental sobre nuestra vida en el planeta llegara a entrar en contacto con otra civilización. Esto es si no choca con cualquier cachivache en órbita, si no se destroza por el paso del tiempo, si no se queda a la deriva, si lo encuentran, si la civilización que lo encuentre es al menos tan inteligente como nuestra especie (esto es lo que menos me preocupa), si saben leer nuestra información y procesarla... entonces, y sólo entonces, ¿qué? ¿Sabrían que existimos o que en el pasado existimos (malditos tiempos verbales) en algún momento?
________Podemos cambiar la perspectiva. Buko es un astronauta búlgaro que una mañana se despierta el primero de todos en la estación de la NASA en la que convive con 3 americanos y una francesa (buena proporción). Lo primero que hace es asomarse al ventanuco pa ver la Tierra y echarse unas lágrimas pensando en la joven Nadia, su amante veinteañera, y después va a hacer de vientre mientras piensa en Jane, su esposa, pero cuando se dispone a girarse dice: "Oh dios mío", que en búlgaro sería "Oh dios mío en búlgaro", y divisa un armatoste que se aproxima a la nave lentamente. Se trata de un objeto esférico, del color del latón, lleno de inscripciones y formas en el exterior que no se distinguen con el temprano reflejo de una estrella. Se aproxima a la ventanilla y distingue, en el lento giro del objeto, el dibujo de un hombre y una mujer tallado en la superficie. Contacta con la base en la Tierra, el centro de operaciones de la NASA cuando ¡sorpresa! le confirman que desde nuestro planeta nunca se ha enviado un objeto similar. Tatatachán! ¿Tal vez llega desde el futuro? O aún más terrorífico impresionante, ¿y si existe una civilización exactamente como la nuestra de la que no teníamos conocimiento?

Pero eso no es todo, ya que una noche de fiesta y una conversación dan para mucho más...

domingo, 11 de mayo de 2008

En el asiento de atrás

El parabrisas guarda la cuenta
de amores y rollos menores.
Nunca el vidrio estuvo tan vivo,
nunca tantas manos
lo acariciaron.
Empellones de amor
recorren la primavera tardía,
el hálito frío y distante
de la noche colgante
pendiente de un rayo de sol.
Y en la tapicería,
mientras cuentan estrellas fugaces
surge un polvo estelar.
La octava gota del quinto mes,
y el que guarda la llave
en el bolsillo de delante
oculto entre pasantes,
muere cada día, cada noche
en esa petite morte
mientras desliza las manos hirientes
y se pregunta
qué más da sexo o amor.

sábado, 10 de mayo de 2008

Usamérica (II)


Me voy por la tangente, y a veces eso es bueno. La cuestión es que el principal culpable (tras las series de televisión, de acuerdo) de mi enamoramiento de Estados Unidos es el cine. Ahora, con 20 años, no me voy a seguir engañando. Probablemente responderé ese ¡Australia! automático. Pero no puede ser tan simple como eso. El cine da respuestas, pero ha de haber algo más. Alguna conexión… algo que me atre inexplicablemente y me obliga admirar hasta lo más deplorable, porque siempre será magníficamente deplorable (no me malinterpretéis). Hablemos de Guantánamo, de la pena de muerte, de las leyes antiaborto, de la paranoia colectiva, el “asalto y derribo” de Iraq… es tremendo. Historias tristes, desagradables y denunciables en la que se supone la sociedad más civilizada del mundo. Si se quedara ahí, incluso yo me sentiría asqueado. No obstante, admiro el filón que presenta y la capacidad de autocrítica.
________Odio a la gente que, sin motivo claro, odia todo lo que viene de América. Antiamericanos, dicen. Son tan inteligentes que utilizan como explicación criterios tales como: Pero es que no puedo con los putos americanos, con lo chulos que son. Se creen mejores que el resto del mundo. Si ni siquiera tienen Historia y quieren comerse el mundo.
________Venga, vamos a meterlos a todos en el mismo saco. A mí me aburren las civilizaciones clásicas. Ya lo he dicho, lo puto peor para memorizar, de modo que ya me veis empollando historia de las grandes civilizaciones (que por otra parte siempre me parecieron iguales) sin ganas ni capacidad, hasta que llegó un punto en el que las chuletas en los exámenes se hicieron cuestión de cada día. No obstante, nunca llegábamos a estudiar historia del nuevo continente salvo para congratularnos con la llegada de Colón (fue España quien financió al hombrecillo, y por tanto se puede considerar orgullo nuestro la hazaña blablabla), con la matanza de indios y… luego se volvía aquí de nuevo con la pesadilla de la Reconquista, y luego que si el paso al Siglo de Oro y demás cosas que me resbalaban. Por eso no le cogí tirria a la historia de un país que fui conociendo por medios externos, ajenos a lo académico (al menos en un principio). Y es que cuando superé el instituto con mi mala memoria…

Inciso: mala memoria. El otro día cogí el Ulises de Joyce, y a pesar de que ando inmerso en otras lecturas le eché un vistazo a la introducción. Ésta corría a cargo del traductor, por lo visto también fan, que dejaba claro eso que he dicho de la traducción como forma de arte. Joyce, dublinés listo y cultivado, empapado en la cultura del tiempo y del pasado, era un hacha. Incluyó en dicha novela múltiples referencias a canciones, obras literarias, dichos populares… Si alguien tuviera la misma buena memoria que él (no ya los conocimientos) acabaría leyendo una obra nueva, el Ulises Completo, plagado de referencias. Y eso es por la memoria. Con el paso del tiempo y las nuevas tecnologías se ha incrementado la pérdida de memoria y ya no es usual esa práctica de memorizar canciones, poesías y demás tan presente en el pasado (menuda contradicción). Además, hace unas décadas estaba mal presumir de mala memoria. Hoy, aquí tenéis al ejemplo vivo. Y no, no sufro de amnesia.

________…con mi mala memoria llegué a la universidad, me quité civilización española con un 4,5 y la benevolencia del profesor (que, como yo, era cinéfilo: tal vez una conversación sobre Woody Allen, neoyorquino de pro, me subió al 5; nunca lo sabré, pero me gusta creer que el tito Allen y su [mi] musa Scarlett sirvieron para aprobar una asignatura). Y no obstante, pasada esa fase del primer cuatrimestre, entré de lleno en el segundo con civilización americana y me llevé –siempre será mi mayor logro xD- un 9,5. Toma clavada. Claro que por aquel entonces mi cinefilia ya no era tan sólo teórica y el profesor compartía gustos y (buen) criterio, y aún recuerdo el día en que hizo un pase de unas escenas de Fargo.

miércoles, 7 de mayo de 2008

lamusique

No podría vivir sin

eveybody's gotta learn sometimes

Un libro

Un libro
Un saco de huesos, Stephen King