Hay que creer en Papá Noel y en los Reyes Magos. Creer en el Ratoncito Pérez y en el amor. Hay que saltar en cada charco y gastar billetes enteros en chucherías. Hay que ir a conciertos donde la gente fuma hierba y bebe litros. Hay que vestir con lo primero que te ofrezca el armario, sin combinar prendas ni mirarse al espejo. No hay que peinarse salvo en situaciones de emergencia. No hay que tener saldo en el móvil. Hay que viajar con una mochila y kilómetros de autobús; hacer autostop. Colarse en el cine en la sala de al lado cuando acaba tu película. Ir a las tiendas a recomendar libros, discos y películas. Hay que acoger animales abandonados y convertir la casa en un refugio. Hay que tener siempre una Biblia cerca (en caso de que se nos acabe la leña) y una lista de cosas por hacer. Hay que posponer las responsabilidades. Hay que reírse de la gente en su cara e insultar cuando venga en gana. Hay que saltar con paracaídas una vez en la vida. Hay que nadar hasta las boyas y dar la vuelta y descansar tumbado en la arena. Hay que follar en las porterías de edificios viejos. Hay que raparse la cabeza o teñirse el pelo verde y azul. Hay que comer chocolate, toneladas de chocolate, infinidad de chocolate. Hay que afeitarse como mucho una vez a la semana. Hay que colgar una pizarra en el salón de casa y escribir ahí versos diversos. Hay que abrazar a desconocidos. Dormir con ellos. Dormir siempre acompañados (no importa de quién). Hay que ser inmaduros.
Hay que ser muy duchos en el arte de vivir.
3 comentarios:
Yo he hecho autostop, quemado alguna biblia, colado alguna vez en el cine, follado en algún que otro portal.
La pizarra es indispensable. Y los "pos-it"
Esa fase es caduca.
Sigo candidamente creyendo en príncipes azules (a mi manera), en el amor puro, en mariposas, en levantarme y ponerme lo primero que hay en la silla, sin pensar, en no peinarme, tocar hasta hastiarme y sobre todo pienso en los que me quieren, por ellos.
Deje de intentar buscar lo que no exite, de pensar en el futuro (nunca debí de pensar en él), deje de hacerme daño y hacerselo a los demás, deje de pensar en ellos y en ellas, deje de comer, deje de soñar(es lo que más deseo volver a tener). Hay noches que lo anhelo tanto, que me tomo un vaso de leche con aceitunas, porque piendo que me hará volver a soñar.
..., Anapi
He hecho y sigo haciendo muchas de estas cosas. Me gusta ^^
También me ha gustado la entrada de las adicciones, me pensaré escribir las mías. :)
Es la segunda vez que llego a este blog sin saber muy bien porqué. Es la segunda vez que lo que leo me parece interesante y que me resulta casi familiar.
Esta vez me guardo la URL en favoritos para no volver a perderla.xD
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