And do you brush your teeth before you kiss? Do you miss my smell? What about me? What about me? What about...?
Va dejando trozos de él por todas partes. Algún día desaparecerá conforme anda.
Ahora en JOSE ALBERTO ARIAS
martes, 4 de diciembre de 2007
Claves
Yo en Stonehenge
Se me acumulan las ideas y me queman en los dedos, pero aun así no encuentro forma de ganarle la batalla al tiempo y al aburrimiento, y como mente obcecada que soy, al final me obligo a escribir ya que no me sale solo. Permitidme esta descompensación de ideas, sin forma pero con fondo, que me comen la cabeza tiempo ha.
Quiero hablar del crecimiento personal que conlleva esta experiencia. Hablar de la Erasmus con las estúpidas y manidas concepciones que se tiene de ella es descalificar algo grande, muy grande. Hay gente que ha llegado a este lugar sin querer salir de casa, con miedo y sin la predisposición necesaria. ¿Para qué? ¿Para quitarte alguna asignatura hueso? ¿Para dar a entender lo maduro que eres ante aquellos que te ven como un crío acojonado por alejarse de casa? No sé dónde queda el espíritu erasmus ligado al de ciudadano del mundo con esa actitud...
Puedes no aprender demasiado inglés, lo cual tampoco es desesperante porque la finalidad del desplazamiento no es esa. El objetivo es más ambicioso que el simple aprendizaje de una lengua: abarca la convivencia, la mezcla, la apertura de mentalidad, la amistad... Aprendes muchas cosas más valiosas. A afrontar los problemas en la distancia, a ver que la realidad es más real de lo que pensábamos, a viajar, a dejar de lado las obligaciones para ser tú mismo el que te imponga un cómo y un cuándo. Aprendes mucho, sí. Incluso de las conversaciones de las que no eres partícipe y de las personas que te rodean.
Cuando estuvimos en Londres, un hombre nos reconoció como españoles. Él era judío, no recuerdo bien de dónde, sólo una frase que nos dijo: "Vosotros sois la primera generación que respira, y eso es precioso". Respiramos. Respiramos e intentamos perdernos en cada átomo de la capital inglesa. Yo encontré la magia de la ciudad viendo el Big Ben por la noche y llamándolo descaradamente Tower of London. Probablemente llevaba toda la razón del mundo al reconocernos como parte de esos provilegiados que vinimos después de los tiempos negros de la dictadura. Hay cosas que no te planteas hasta que se te presentan en forma de señor judío que habla español entre una muchedumbre de Londres. Curioso.
El día de vuelta a Swansea encontramos algo bastante distinto: la entrada al Metro más próxima estaba cerrada porque se había producido algún tipo de ataque (¿un apuñalamiento tal vez?), y pudimos ver la sangre que manchaba todo.
Se aprende de todo.
De cada momento.
De cada persona.
Y lo mejor de todo esto sin duda es ser consciente de dicho aprendizaje. Hay más claves, cientos de ellas, pero las dejaré para otro día.
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7 comentarios:
Viene a ser más o menos: la vida real. Quiero decir que la gente de tu edad aún no se ha integrado en el circuito laboral, ni se ha ido a vivir sola (tal como está el panorama para muchos es utópico)por eso para muchos la Erasmus es como el salto del nido.
Me alegro de que te sirva la experiencia, aprende todo lo que puedas de ella, porque cuando salgas ahí fuera verás que tienes que convivir muchas horas con gente desconocida (en el trabajo) y has de amoldarte a cosas que aborreces (en el trabajo o en tu casa) y debes asumir responsabilidades absurdas cada dos por tres.
Lo dice el anuncio de Decatlon "La vida es dura, hay que tener un corazón fuerte" cualquier cosa que te inyecte experiencia, es válida.
Ah, muy bonita la frase del señor, una generación son 30 años...respiramos muchos, porque nacimos en democracia.
La gente es lo mejor (y lo peor) del planeta, inagotable fuente de inspiración. Exprímelos¡¡
Más besos
Yo de vez en cuando tengo que luchar frente a los topicos que conlleva,los que los dicen no se fueron nunca de beca, irse de Erasmus. Personalmente lo veo como un punto de inflexion para poder cambiar el prisma desde el que veo las cosas, darme cuenta de que hay otras vidas fuera del reino y conocer, conocerme a mi y conocer a otros o incluso no saber que es lo que voy a conocer mañana.
Y se aprende cada dia. No solo se aprende un idioma, sino una cultura, otra forma de entender las cosas, otro sentido del humor, gente, todo.
Yo pienso exprimir esta experiencia mientras pueda porque sé que, por lo menos para mi y al final eso es lo que cuenta, merece la pena.
(tambien creo que nuestra generacion no es consciente de que la libertad de la que disfrutamos no ha existido siempre. La Historia se olvida pronto o ni tan siquiera se aprende. Triste, l averdad)
Uno abraccio grande da Firenze. Buona fortuna!
La primera vez que estuve en Londres, el 2º día me fui a mi bola a conocer la ciudad y me perdí; no sabía volver al hotel. Pregunté a muchas personas y me ignoraban descaradamente o me decían que no sabían dónde les decía (hay que tener morro, mi hotel estaba al lado del Palacio de Kensington) hasta que por fin, un tipo encantador con un turbante en la cabeza y barba a lo islamista me indicó con detalle cómo llegar hasta la boca de metro abierta (era día de fiesta y algunas líneas estaban cerradas) más cercana (lo que yo estaba buscando). Son experiencias que no se olvidan, todas y cada una de ellas, por muy pequeñas que parezcan...
Muchos besos, guapo :)
Hace poco le dije a alguien... aprovecha lo que estás viviéndo ahí porque a la vez estás creciendo y conociéndote de otra forma.
Y así es.
1 besico guapo
Es satisfactorio darse cuenta de como uno va creciendo, y de las circunstancias que llevan a ello.
Y, no sé por qué, pero hasta cierto punto relaja (el darse cuenta, que no siempre las circunstancias).
besus!, mentiroso crecedor :P
Es bonito ser consciente de todo ese enriquecimiento incesante a lo largo de nuestra vida, aunque unas veces es más denso que otras, aprovecha esta experiencia pues! un abrazo y te veo dentro de muy muy pokito ^^
No podría estar más de acuerdo contigo...
Darka.
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