¡Joder, que soy universitario!

Yo, que soy un animal, que no entiendo de nada.... no, no voy a cantar una canción de Pereza porque no me gustan (podría haber tirado del chiste fácil este de: porque me da pereza), pero voy a hablar de lo animal que soy.

Pues es que pasa una cosa, y es que voy al revés del mundo (lo mío sí es una historia del revés, y no las de los cuentacuentos). Me explico. Se supone que cuando el curso va normal, pues puedes llevar una vida medio decente y tal, con la casa recogida, sin pelusas de dimensiones terroríficas, etc. No obstante, a mí las cosas me van de otra forma, y es que el otro día estaba el piso de una manera que tuve que echarle una foto porque me negaba a seguir allí viviendo en tales condiciones. Paradójicamente, ahora que la época de exámenes ha comenzado tengo todo limpio y recogido. Lo mismo se debe a que Belén vino el otro día y mi madre 3 días después, por lo que nos vimos obligados a limpiar más que nada por vergüenza ajena. Así pues, la fortaleza se encuentra visitable durante estos días. Y yo ahora mismo debería estar liado con una traducción, pero me entra una pereza... (ahora sí). Os dejo unas fotos de la sala de estar y de mi cuarto, pa que os hagáis una idea.